La Arquitectura Bioclimática estudia las condiciones naturales del entorno para aprovechar los recursos naturales y alcanzar el confort térmico, ahorrando así en consumo de energía y disminuyendo el impacto ambiental.
Aunque se piense que es una tendencia nueva, no lo es ya que antiguamente otras generaciones recurrían a los recursos naturales. El desarrollo energético, la disponibilidad de energía, etc, ha hecho que los procesos constructivos se hayan alejado mucho de esas técnicas tradicionales de construcción que se habían realizado durante generaciones.
Ahora se trata de retomar un camino que nunca debió abandonarse. Para ello disponemos de nuevos materiales, nuevas técnicas de diseño y constructivas que nos ayudarán y podremos incluso mejorar esos conocimientos que se tenían de Arquitectura Bioclimática.
Las viviendas bioclimáticas pueden generar un poco de aumento de coste en la construcción aunque esto en unos años se amortiza gracias al ahorro energético que permitirán distintas características que hay que tener en cuenta.
La Arquitectura Bioclimática tiene que tener ciertas características como:
-Ventilación correcta y aislamiento de los muros, para conseguir la máxima eficiencia en el mantenimiento de la temperatura.
–Integrar energías renovables, para no contaminar ni gastar consumiendo combustibles fósiles cuando necesitemos de esa energía.
-Orientación de la construcción, para aprovechar al máximo las horas de luz.
-Utilizar todo lo que se pueda materiales naturales, y aquellos que más se usan en la región ya que no gastaremos en el transporte por ejemplo.
-Intentar reciclar todos los residuos que podamos.
-Los elementos exteriores pueden ser de gran ayuda, como toldos o persianas, o pérgolas.
-El color tanto de los techos como de las paredes también influye: los claros reflejan la luz y así se refrigeran los espacios. Los oscuros, en cambio, por ejemplo en techos, absorben la luz por lo tanto el calor. Un tejado claro, frente a uno oscuro, reduce la absorción de calor en un 50%.
-Si disponemos de jardín, optando por árboles de hoja caduca aprovechamos que frena el sol en verano pero podemos seguir disfrutando del calor del sol en el invierno.
Una Arquitectura Bioclimática en definitiva nos ayuda a generar un gran ahorro pero sobre todo a cuidar y ser respetuosos con el medio ambiente.
Cursos relacionados:
Postgrado en Arquitectura Bioclimática y Cooperación Internacional
Postgrado Arquitectura Bioclimática y Cooperación Internacional