El diseño sostenible es parte de las nuevas formas de construcción que está teniendo el sector de la construcción, que reagrupa las técnicas sostenibles y los materiales sostenibles para construir un proyecto responsable. En este artículo desarrollaremos “Impulso verde”, el primer edificio público en Galicia que está construido a base de madera autóctona y tiene un proceso de autoabastecimiento de energía propio.
Si bien, diferentes países están poniendo en marcha proyectos que integran las técnicas sostenibles y los materiales sostenibles en pos de promover la baja de la contaminación y hacer más eficiente sus edificios, España no quedó afuera. En este ejemplo, le tocó al Ayuntamiento de Lugo, que llevará a cabo en esta ciudad gallega el edificio público que decidieron llamar “Impulso Verde”.
Impulso Verde es el primer edificio público de Galicia que estará construido con madera autóctona y será también el primero en autoabastecerse energéticamente a partir del diseño sostenible. Además, este inmueble piloto será un proyecto ejemplificador para la zona, en donde podrá ser el primero de otros tantos que logren ver los beneficios y la baja de costos que genera esta forma de construcción.
El objetivo de esta obra es convertirse en la semilla del primer barrio ecológico de España, que contará con edificios de madera como elemento estructural de construcción y formará parte de las medidas de adaptación dispuestas por Europa para mitigar el cambio climático. Esto hace que, además de ser un edificio sostenible, logre tener una construcción responsable.
El edificio será un espacio de coworking y otras oficinas municipales, de uso público. Si bien, aún no está finalizado, lo están desarrollando dos centros tecnológicos: EnergyLab y Pemado, además de arquitectos especializado en edificios sostenibles.
Su construcción está siendo empleado con los materiales de su entorno en donde Lugo sigue estando entre las provincias con mayor producción de madera de España: en el 2017 extrajeron 3,8 millones de toneladas. Y, además, el 52% de la superficie del ayuntamiento de Lugo es agro-forestal, pudiendo suministrar los materiales sostenibles importantes para el proyecto.
Por su parte, Impulso Verde contará con la re-utilización del agua de lluvia, implementando un sistema propio que ayudará, con una de las técnicas sostenibles, a bajar los costos del uso de agua. También, desarrolla un sistema propio para trabajar los desechos, en donde fracciona la basura, para hacer de los desechos energía.
La posición en la que se encuentra el edificio de tres pisos tiene un diseño sostenible que no solo le permite aprovechar los beneficios solares, sino que implementa un ahorro energético con la orientación de los viales, zonas verdes y el uso de los vientos.
En conclusión, la tendencia del diseño sostenible ya está instalándose en el sector público y privado, a partir de lo que genera: bajar costos y la contaminación producida.
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